miércoles, 5 de enero de 2011

Feliz año nuevo!


Parece mentira pero ya es día 5 de enero. Las navidades van pasando. Ya solo queda la noche de reyes :-)

Continúo sin ordenador y está siendo un poco fastidioso porque hay muchas cosas que no puedo hacer. Entre ellas, escribir mas a menudo. Espero que pronto vuelva a disponer del mac.

La semana pasada vinieron Esther y Alberto. Marcharon hoy por la mañana. Les echaré de menos. Hemos pasado muy buenos días. La noche vieja la pasamos en casa de Zor. Cenamos una sana y rica cena, a base de gambones, langostinos, verduritas y carne a la plancha. Eris hizo unos hojaldritos rellenos buenisimos y Esther un super flan que terminamos comiendo a mordiscos. Este año no todos comimos uvas. Había para elegir, desde lacasitos a lichis, mandarinas chinas y madroños. Me quedé con el chocolate para endulzar la entrada del año :-)

Fué una noche un tanto extraña, la verdad. No obstante me lo pasé genial bailando y riendo. En general la gente no estaba muy animada. Supongo que por razones varias. Terminamos la noche comiendo churros en un chiringuito.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Estaba recordando un episodio muy bonito que aconteció el otro día. Iba con Esther, paseando por Sol. Veníamos de la espartería. Una tienda maravillosa llena de cosas útiles donde habían comprado unos cuantos metros de yute. Veníamos hablando de la facilidad que tienen algunas personas de incomodar a otras. Personas que ofenden al libre albedrío sin ninguna razón aparente excepto la de herir. La conversación trataba de ser constructiva y aunque un tanto apenadas por aquello que comentábamos, hicimos todo lo posible por comprender estas formas de actuar....El caso es que subíamos por Callao, estaba diluviando, la calle parecía una alfombra de personas, apenas se dislumbraba un hueco libre. Típica escena de Madrid en navidad. Cerca del Afnac, vimos 4 o 5 personas con carteles que decían, "Abrazos gratis". Esther y yo nos miramos y sonreímos a aquel chico que a pesar del frío y la lluvia estaba allí, dispuesto a entregar lo mejor de si mismo. La escena me pareció maravillosa. De veras, muy muy bonita. No pude si no dar un fuerte abrazo y entre risas fuimos pasando uno por por uno. Hasta llegar al ultimo, deseando una feliz navidad llena de cariño convertido en abrazos. Seguramente a mucha gente, la escena le pareciera ridícula pero a mi me pareció de lo mas bonito que he visto. Tras unos pasos, nos miramos. Por mi parte, me había emocionado tanto que aún tenía que contener las lágrimas. Miré a Esther y creo que ella sintió algo muy parecido, así que ambas bajo aquel paraguas que compartíamos comenzamos a reír y a llorar simultaneamente sin poder parar. Sin duda, emocionalmente de lo mejor de la navidad.

Mi deseo para este año, que todo el mundo y cada día un poco mas, esté dispuesto a dar y a recibir cariño.


Esta noche nos quedamos solos en casita que también apetece de vez en cuando. Comeremos roscón y quien sabe si habrá alguna sorpresa.

Os deseo un feliz año nuevo!


Hasta pronto!

No hay comentarios: