viernes, 14 de mayo de 2010

Vida

Sueño…

Ando, siento que ando. Aprecio la textura del piso, gelatinosa, densa, y resbaladiza en ocasiones. Me visualizo, tengo consciencia de ser, percibo el olor fresco, penetrante, limpio. Lo condenso, lo retengo, lo secuestro. Se expande, me limpia, me arranca los residuos entrañables. Lo expulso, lo libero, lo absuelvo. Me despejo ante el camino, me vacío, me renuevo. Todo es tan real que puedo ver mi cuerpo convertido en un cajón. Mis pies lo trasportan con torpeza y gracia através del suelo pegadizo. De nuevo mi cuerpo. Traspaso una especie de gruta. Pasadizo mohoso, húmedo, acuoso, chorreante. Tengo manos, las veo. Palpo las paredes que están vivas. Crece musgo, me acerco, lo espiro. Lo reconozco paladeándolo, absorviendo su jugo en esencia, pasa por mi, y sale de mi pecho dejándome impregnada durante un instante. Intensa humedad, fuente de vida…

No hay comentarios: